Han pasado 15 años desde que Botanicoir comenzó a trabajar con productores de tomates para desarrollar lo que entonces era un sustrato relativamente nuevo para el cultivo. Hablamos con dos de los primeros en adoptarlo sobre cómo ha evolucionado para satisfacer las demandas de los sistemas de producción actuales y las cualidades que más valoran.
Cambiar de un proveedor de un sustrato básico a otro puede llevar algún tiempo acostumbrarse a cualquier negocio hortícola. Para los productores de cultivos de temporada larga y de alto valor, como los tomates, cambiar el tipo que se usa por completo es una decisión muy diferente.
Las placas de lana de roca fueron durante décadas la única opción para gran parte de la industria. Pero hace unos 15 años, en respuesta a una solicitud de uno de sus clientes del supermercado, Andy Roe, gerente de producción de los tres viveros de tomates de Flavourfresh Salads en Merseyside, comenzó la búsqueda de una alternativa. Tenía que reciclarse fácilmente, tener una menor huella de carbono y hacer el trabajo tan bien como la lana de roca.
En ese momento, el bonote comenzaba a hacer una contribución importante como ingrediente para sustituir la turba en los sustratos de cultivo para cultivos ornamentales, pero pocos habrían pensado que tenía un lugar en la producción de tomate. “Hicimos pruebas con bonote, así como con algunos otros materiales, pero inicialmente no pudimos encontrar uno con la calidad y consistencia que necesitábamos”, dice el Sr. Roe.
El proveedor de fibra de coco Botanicoir estaba recién comenzando en el Reino Unido en ese momento y proporcionó a Flavourfresh algunas bolsas de cultivo para que las probara. “Incluso en ese primer año, obtuvimos resultados similares a los del resto de nuestra cosecha, por lo que encajó perfectamente”, dice.
Para el cultivo hidropónico, todo se trata de controlar la humedad: si lo haces mal al principio, puede llevar meses volver a poner las plantas en marcha. "En bonote, eso se debe a la forma en que las fibras crean una acción capilar", dice el Sr. Roe. “Demasiadas partículas finas en la mezcla la hacen demasiado húmeda, pero una proporción demasiado alta de las partículas más grandes significa que está demasiado seca, no hay nada que retenga el agua. Hacer que la mezcla se adapte al cultivo es lo que le brinda la capacidad de mantener el contenido de agua que necesita durante el día y, al mismo tiempo, secarse rápidamente durante la noche ".
Sin embargo, hubo problemas desde el principio, incluidos los niveles de cloruro que se acumulan naturalmente en y sobre las cáscaras de coco de las que se deriva el bonote, pero se abordaron rápidamente. “Tuvimos que modificar nuestra estrategia de riego para hacer frente, pero me impresionó la rapidez con la que Botanicoir, entonces todavía relativamente nuevo en el cultivo, descubrió cómo eliminar el problema”, dice. “También trajeron a un asesor especializado de los Países Bajos para que nos guiara a nosotros ya los otros productores que buscaban cambiar al bonote.
“Durante los primeros años de pruebas fue fácil de ver, con las mismas variedades, en los mismos invernaderos, con la misma estrategia de cultivo, logramos constantemente mejores rendimientos, calidad y sabor”.
Ahora, 95% de la producción de tomate de Flavourfresh está en Botanicoir. “Lo único que evita que sea 100% es una variedad que cultivamos y en la que estamos trabajando con la empresa para obtener el sabor que estamos buscando”, dice.
Andy Roe dice que su confianza en el bonote se vio favorecida desde el principio por el apoyo que recibió de la empresa.
Una de las razones por las que el vivero de 26ha de APS Produce en la Isla de Wight se trasladó al bonote fue lo que le sucede al sustrato al final de la cosecha. “Tenemos alrededor de 6ha de producción orgánica; podemos compostar el bonote y usarlo en nuestros suelos orgánicos ”, dice el jefe de agronomía del vivero, Paul Howlett.
“La única opción para deshacerse de la lana de roca en la isla es enviarla a un vertedero, por lo que poder reciclar el bonote es mejor para nosotros comercialmente y para el medio ambiente”.
Él también tenía preocupaciones iniciales sobre la obtención de una fibra de coco de calidad constante. “Es un producto natural”, dice. “Algunos que probamos eran demasiado variables, con diferentes características de humectación y secado en diferentes bolsas del mismo proveedor. Además de suministrar un producto consistente, sentimos que Botanicoir tenía el nivel adecuado de interés en lo que estábamos haciendo y apoyo para nuestras pruebas ”.
Paul Howlett trabajó con Botanicoir en el desarrollo de sus Grow Cubes
Los dos cultivadores utilizan mezclas de Botanicoir ligeramente diferentes. Mr Howlett trabaja con Breeze XD, que, cuando está completamente mojado, contiene 30.5% de aire y 51% de agua. Con su inclusión de una alta proporción de los tamaños de partículas más grandes, descubre que "no se puede regar en exceso".
“Obtener un buen sistema de raíces es crucial”, dice. "Obviamente, eso depende del equilibrio de aire y agua en la losa y de poder secar y volver a humedecer de manera uniforme y controlada, y eso está determinado por la mezcla de componentes de bonote".
Los cultivos de Flavourfresh se cultivan en un sustrato "más seco", Dry XD, que tiene un contenido de aire de 32,5% y un contenido de agua de 48%. “Anteriormente usábamos Botanicoir Dry”, dice el Sr. Roe. “Encuentro que la mezcla que usamos ahora es particularmente fácil de volver a humedecer de manera uniforme después de que se seca; eso nos da mucha confianza contra, por ejemplo, tener una falla en la entrega del riego ”.
Botanicoir Dry XD se hidrata rápidamente pero con muy buen drenaje
Él cree que también ha ayudado con el manejo de la botritis. "Estamos viendo botrytis en quizás solo 5% de lo que solíamos ver y, aunque no tenemos pruebas de ensayos, estoy seguro de que el sustrato está contribuyendo".
El Sr. Roe ha estado trabajando recientemente con la empresa para ver si hay alguna ventaja en incorporar virutas de madera en la mezcla. "Sabíamos por ensayos anteriores que la viruta de madera aporta cierta actividad microbiana", dice. "A su vez, eso pareció darnos mejores plantas con follaje más oscuro, más crecimiento generativo y algunas ganancias de rendimiento".
Las bolsas de prueba producidas para él se probaron coincidentemente al mismo tiempo que el vivero estaba probando diferentes formas de manejar la estera de raíces. “Terminamos sin estera de raíces en el cultivo que crecía en el bonote con virutas de madera agregadas”, dice. “Nuestra agua se recircula, por lo que estábamos aún más interesados en ver que tampoco pudimos establecer la estera de raíces en la prueba adyacente en la fibra de coco estándar.
“Necesita más investigación, pero sospecho que es la actividad biológica de la viruta de madera la que está teniendo efecto. Si es así, es sorprendente que pareciera proteger no solo las plantas en esas bolsas sino, a través del agua, todo el bloque. Parece que nos hemos librado de la estera de raíces ".
Desde la prueba, le pidió a Botanicoir que hiciera la mezcla de astillas de madera como principal sustrato comercial de Flavourfresh, e incluso se le ha dado el nombre de G'Roe Bags.
El Sr. Howlett, mientras tanto, estuvo muy involucrado en el desarrollo de los Grow Cubes de Botanicoir para las plantas jóvenes. “Queríamos algo que pudiéramos utilizar para cultivar una buena planta y transferirla directamente a las bolsas de coco”, dice. “Ese equilibrio entre el aire y el agua es igualmente crítico para la planta joven. También trabajamos con ellos para desarrollar el material de la 'bolsita de té' para la cubierta porque era importante para nosotros que fuera completamente compostable ".
La confianza en un proveedor es particularmente importante cuando se utiliza un sustrato que se deriva esencialmente del subproducto de otro cultivo, pero ambos productores han visto por sí mismos el enfoque de Botanicoir para la producción y el control de calidad en Sri Lanka.
“Tuvimos confianza desde el principio debido al nivel de apoyo que recibíamos de todos modos”, dice el Sr. Roe. “Pero ciertamente ayudó ver los sistemas en su lugar para limpiar, nivelar y probar el producto. Hubo un grado de tecnología mucho más alto de lo que esperaba y la atención al detalle para hacer que el producto sea tan consistente como lo necesitamos fue bastante humilde ".
El Sr. Howlett dice que estaba especialmente interesado en ver cómo eran las condiciones de trabajo en la fábrica.
“Esto es importante no solo para los productores, sino también para nuestros clientes de supermercados”, dice. "Así que es bueno poder decir que hemos visto la configuración por nosotros mismos y estamos contentos con ella".
Si bien Andy Roe y Paul Howlett fueron de los primeros en explorar la fibra de coco como sustrato de tomate, ha ganado un seguimiento cada vez mayor en los últimos 15 años, tanto por la confianza que da a los productores en el manejo de la cosecha como por su facilidad de reciclaje al final de uso, tanto que ahora se estima que está en la raíz de unos 35-40% de todos los tomates cultivados en sustrato.
